Entre los aspectos más importantes dentro de la construcción o rehabilitación de edificios en Salamanca están las fachadas con morteros.
Como hemos expresado en otras oportunidades, la fachada de una edificación es como la piel del cuerpo, es lo primero que percibimos. La primera impresión de una casa unifamiliar, de un edificio de viviendas, de uso comercial o institucional nos la transmite su fachada. Por eso, en obras nuevas o en obras de rehabilitación de edificios en Salamanca, la importancia de la fachada es determinante, no solo desde el punto de vista estético, sino también en lo concerniente al tema de seguridad.
Las características de protección de las fachadas las otorgan los componentes de los morteros. La forma en que los materiales integran el mortero le confiere unas propiedades y un comportamiento ante el fuego y ante las exigencias de confort tanto acústico como térmico, además del ahorro energético que este último implica.
Para la ejecución de las fachadas con morteros se utiliza una mezcla compuesta por áridos, agua y un conglomerante como cemento o cal. Dependiendo del uso que se le quiera dar, se le agregan aditivos químicos que le proporcionan a dicha mezcla las características requeridas para cada caso.
Dada la importancia que siempre ha tenido el tratamiento de las fachadas, queremos abundar en lo relativo al aislamiento térmico. Aislar térmicamente una edificación en forma adecuada redunda en una disminución significativa en el consumo de energía y, por tanto, en una reducción importante en el total de la facturación por ese concepto. Para el logro de ese cometido se utiliza un conjunto de técnicas que conforman el Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior, más conocido por sus siglas S. A. T. E.
Si estás construyendo obra nueva o renovación de una existente y necesitas rehabilitar la fachada, puedes contactar con nosotros. En Ingrinamar te asesoramos y nos adaptamos a tu requerimiento.